Pese a encontrarse suspendido por la Fifa, su expresidente Joseph Blatter volvió a la escena de un mundial.
Blatter llegó el martes a Rusia, con la esperanza de ver dos partidos y tal vez de reunirse con el presidente Vladimir Putin.
El exlíder del órgano rector del fútbol aterrizó en Moscú para atender una invitación que le hizo Putin hace dos años. Ambos realizaron tareas esenciales para ayudar a que Rusia consiguiera la sede del máximo certamen ocho años atrás.
“Soy invitado del comité organizador, pero ellos harán los arreglos para ver al presidente en caso de que sea posible”, dijo Blatter a la prensa en un hotel de cinco estrellas en Moscú.
Añadió que un encuentro con Putin “no se ha definido”. “Pero soy un invitado. Acepto el programa que me ofrezcan y estoy contento por estar aquí”, manifestó.
El otrora mandamás del fútbol posó para fotografías con varios aficionados de México y Portugal que llegaron a esta zona céntrica de Moscú, ciudad a la que voló desde Zúrich.